Hongos shiitake aprender a usarlos

Hongos shiitake para una mejoría en un periodo de tiempo más largo.

 

Se trata de una bella seta que crece sobre materia que esté descompuesta, mayormente madera de roble, así como de eucalipto, entre otras, y que crece sobre todo en las áreas montañosas, cálidas y con humedad.

El remedio con shiitake es uno de los más empleados en La Medicina Tradicional China . Se usa para reactivar el chi o energía vital, y al mismo tiempo la energía de la sangre. Se le designa el dulce como sabor, y el estómago como órgano asociado.

Es un nutriente que fomenta una vida saludable y duradera.  Se emplea con fines terapéuticos para combatir diversas afecciones: infecciones, trastornos del hígado, fatiga, afecciones del riñón y hasta el cáncer.

El lentinan, también llamado como AHCC o compuesto correlacionado de hexosa activa, es un extracto de los hongos shiitake. Estimula resultados muy efectivos como agente antioxidante y antiinflamatorio actuando a nivel de la célula.

 

Investigaciones realizadas diversos laboratorios recomiendan que el AHCC puede contribuir a suprimir las células del cáncer de mama, y su vínculo con el sistema inmunitario podría colaborar a tratar el cáncer sanando los sistemas inmunitarios que quedan débiles por el tratamiento con la quimioterapia.

El extracto de shitake aumenta la fortaleza del sistema inmune y se ha visto que puede ser de mucha ayuda frente a  infecciones por bacterias y virus, donde se incluye el sida incluso

Si has notado que el caldo de huesos es gratificante, en la siguiente oportunidad súmale unos cuantos hongos shiitake troceados. Estudios realizados arrojaron que ingerir de 5 a 10 g de hongos shiitake todos los días contribuía a excitar el sistema inmunitario del ser humano después de 4 semanas de consumo.

Son más recomendables los shiitakes frescos. Una vez cocidos tienen mucha más suavidad y delicadeza que los secos.

 

A la hora de cocinarlos, es importante que hayas remojado con anterioridad los shiitakes secos en agua templada toda la noche, o durante un mínimo de cinco o seis horas previas a su uso.

 

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